[PERSPECTIVAS EXPRESIVAS I] And we met again

Para no tener que leeros el tostón:

El tostón:

Una semana más, volvemos a la ETSAM y su entorno. 
Siendo sincera, me está encantando pasear tanto por esta zona. Cada día que voy descubro una cosa nueva o me fijo en algo que no había visto la vez anterior. Además cada trocito de césped me parece el sitio perfecto para pasar el rato con un bocadillo rico.
Sí que es verdad que me ha recordado a cuando íbamos al Distrito Telefónica, que vas pensando 'hago tantos dibujos en tanto tiempo', y luego acabas haciendo solo la mitad. Pero dejando de lado los agobios, salir a dibujar con musiquita es siempre de agradecer, y si hubiese sido lo suficientemente inteligente, habría ido más veces y no me habría quedado con las ganas de dibujar perspectivas de los campos de Rugby. No había dejado de dibujar porque en Proyectos tenemos que hacer un dibujo diario en un cuaderno, pero sí que he notado que estaba muy desentrenada. Con todo esto, hacer perspectivas ha pasado de ser una frustración a ser un rato de desconexión, concentración y disfrute. Tengo ganas de volver y hacer más y más y más.

Como siempre, los dibujos no son gran cosa PERO brother que ya no se me quedan en solo líneas, parecen cosas!!!!
A veces intento construir y construir un espacio pero se me resiste, que es lo que me ha pasado con este:

        

Quería que se vieran el desnivel que hay desde el parking y pistas de la ETSAM hasta la calle que tiene detrás. Un desastre, vaya.

Pero otras quedo más contenta con el resultado:

La cantidad de árboles que hay, esos trocitos de césped en desnivel... Sin dejar de lado la corona de espinas que nunca pasa desapercibida (y todavía no me da para dibujarla con rigor). En las fotos se pierde un poco el color por el escaneado, pero juro que he intentado ordenar los espacios.

Empieza una semana dura, y menos mal que existen los lunes al blog porque si no no habría hecho nada (ya os he dicho que no sé mentir). Semana Santa siempre para mí es tiempo de reflexión y dudas... Creo que es bastante obvio el por qué. Pero esta ha sido especial. Después de un año, por qué no decirlo, de mierda, en el que por X o por Y a algunos nos cuesta ver lo positivo, aniversario del fin de mi vida anterior... Por fin he visto que todo esto empieza a arrancar de nuevo. Trabajar en uno mismo, familia, reencuentros con amigos, risas, solecito, campo, comida rica... Si es que no se puede pedir más.

No he avanzado, o directamente, puesto al día todo el trabajo que tenía (una oración por mi Autocanon, que se ha quedado el pobre cogiendo polvo, prometo pasarle el plumero). No he visto ni una sola película, que era lo que más me apetecía en el mundo después de mis descubrimientos en Navidad. Pero no pasa nada, porque he disfrutado de manera distinta.

Ahora toca volver a la rutina con tensión, café en mano y una mejor perspectiva.